Las calles estaban desiertas, por las carreteras apenas circulaban vehículos. Ayer a las 20:30 horas, España entera se paralizó ante el partido de la final del mundial que enfrentaba España contra Holanda. Las plazas y principales calles donde se habían instalado pantallas gigantes y los bares fueron el principal punto de encuentro de los seguidores de “La Roja” que sufrieron hasta el último momento para ver ganar a su equipo.
Una vez más, las fuentes se convirtieron en el lugar de reunión para la celebración del primer mundial que ha ganado el conjunto nacional para festejar, de esta manera, un partido que ha hecho historia en el mundo del deporte nacional e internacional.
Esta tarde los jugadores mostrarán el trofeo a todos su seguidores en Madrid y a los cientos de miles de personas que seguirán la celebración a través de la televisión.
TROFEO. Alzar la Copa del Mundo, como hiciese ayer el capitán de la Selección Española, Iker Casillas, es un momento único en la carrera de un futbolista y muy difícil de olvidar.
La actual copa, que tiene vigencia desde 1974, está formada por dos figuras humanas que, juntas, sostienen el planeta Tierra. Tiene una altura de poco menos de 40 centímetros y pesa alrededor de los 6 kg. Su valor es muy elevado ya que el 75% del trofeo es oro puro, o lo que es lo mismo, 5 kg. de oro de 18 kilates.
ESTADIO. El Soccer City, estadio donde se ha disputado la final de este Mundial de Sudáfrica fue levantado hace tan sólo 23 años sobre una mina de oro y tiene una capacidad de 94.500 espectadores.
El estadio, considerado por muchos todo un orgullo nacional sudafricano, tieen forma de calabaza y su fachada está concebida en colores marrones y naranjas de hasta seis tonalidades diferentes, mimetizándose con los alrededores, de tierra rojiza.
Se ha sufrido mucho, pero al final ha ganado quien más lo merecía, el equipo que ha hecho el mejor fútbol... cuando le han dejado. Ese mismo equipo que cuando la táctica del rival no le ha permitido jugar bonito ha sabido tirar de casta y tenacidad. Ahora, todos unidos para celebrar un momento histórico, al menos, para el deporte. ¡Al fin Campeones!
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